El fin de semana pasado tuvo lugar la final de Oro de Primera B de ARUSA, donde Húsares y Santa María, se verían las caras en lo que fue un partido muy duro y de mucho contacto físico.
Serían los universitarios que, a 8 minutos de iniciado el encuentro, conseguirían su primer try convertido de encuentro. No pasarían más de 3 minutos y, tras una amarilla para el cuadro de la calavera, los santos volverían a repetir una anotación en el in-goal rival. De ahí en más, y pese a tener ventaja numérica en cancha, los universitarios no podrían imponer su juego veloz, ante un equipo de Húsares que iba de menos a más, gracias a un juego muy agresivo, tanto así que verían una nueva tarjeta amarilla en el minuto 25.
Santa María aún así, no lograba concretar su ventaja numérica en la cancha, recibiendo incluso un try en contra en el minuto 29. El ímpetu qué húsares estaba poniendo en el partido no se reflejaba en el marcador, sin embargo, poco a poco fueron causando daño en la defensa universitaria, no sin caer en indisciplinas que le costarían una nueva amarilla. De esta forma, el encuentro se iba al descanso con Santa María a la cabeza por 5 – 20 momentáneamente.
La segunda parte del encuentro sería una nueva historia, Húsares ajustaría las piezas y lograría hacer caer en el error a Santa María, quienes se verían con una amarilla en el minuto 50. Esto abriría una brecha que la calavera aprovecharía para matricularse con dos tries convertidos, en las cercanías de la mitad del segundo tiempo. Los universitarios tuvieron entonces que echar mano a todos sus recursos, lo que les entregaría un nuevo try en el minuto 64, no obstante, un par de minutos después, una amarilla les haría jugar los últimos 5 minutos en desventaja numérica. Allí fue donde Húsares se puso al mando del juego y comenzó a percutir una y otra vez, hasta lograr hacer retroceder considerablemente la defensa del santa. Con el tiempo cumplido, los de negro descontaban por medio de un try, lo que no serviría para cambiar el 24 – 28 que, tocado el silbato, daba por justo ganador al cuadro rojo y amarillo de Santa María, que supo controlar los momentos claves del partido; en lo que pudo haber sido una remontada del equipo rival.
Francisco Saavedra, técnico de los «sansanos» nos comentó sobre las sensaciones del partido:
La sensación es de satisfacción total. Era una oportunidad que anhelabamos y por la que trabajamos muchísimo, y una vez teniéndola en frente, nos focalizamos en creer en nuestro juego y confiar en nuestra preparación. Eramos muy concientes de que Husares es un equipo muy aguerrido, muy sólido en defensa y con muchísima voluntad de lucha, por lo tanto nuestra tarea principal estaba en ser consistentes con nuestras estructuras, meter mucha presión, ser sólidos en los fijos y muy efectivos en resolver y conservar nuestras pelotas en los contactos. Sabíamos también que iba a ser un partido muy emocional, con momentos altos y bajos, pero que con resiliencia y mucho «carácter», podíamos sacar la tarea adelante.
En efecto fue un partido emocionante, supimos mantenernos firmes en los momentos bajos, incluso terminamos defendiendo los últimos minutos del partido con 13 jugadores (una TA y un lesionado sin opción de reemplazo porque habíamos hecho todos los cambios), pero el temple y convicción de los muchachos fueron los que lograron sellar éste hermoso e histórico triunfo. Sólo puedo decir que es un orgullo total.Mis felicitaciones a Húsares y a Tito Olivares por un gran año y una tremenda final.
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