El pasado domingo, el Alcobendas de Matías Cabrera, aseguró su presencia en la final de la División de Honor Española, tras vencer en calidad de local al Barça Rugbi. El cuadro madrileño, capitaneado por el chileno, buscará ganar su segundo título de la liga en su historia.
Vistiendo la 4 desde el inicio del partido, Cabrera saltó junto a los granates a disputar la llave de semifinales de una liga española que se ha jugado con regularidad, pese a la actual pandemia. Esta última que incluso suscitó polémica la semana anterior, dado que el Alcobendas ganó por Walk Over (W.O.) ante el Ciencias Universidad Pablo de Olavide; equipo que presentó casos de Covid-19, obligando a la suspensión del partido y, al no tener mayor margen en el calendario, la Federación Española de Rugby entregó la victoria a los madrileños. Pese a ello, el Alcobendas logró dar vuelta la página y plantar su buen juego que, semana a semana, lo ha consolidado como uno de los líderes de la división de honor del rugby español.
Apenas iniciaban las acciones, el cuadro de Alcobendas abrió el marcador con un try convertido al minuto 2. Ese buen arranque se vería rápidamente empañado por la amarilla al octavo por juego sucio, en el minuto 7. Con ello en mente, y pese a que los visitantes descontaban por tiro penal, los granates volverían a marcar un try en el minuto 13, cosa contestada por el Barcelona por el mismo medio en el minuto 15, junto con una nueva amarilla para el Alcobendas, esta vez para su wing ciego. De ahí en más, pese a que los madrileños estuvieron un par de minutos con dos jugadores menos, las acciones entraron a una meseta donde ni uno de los dos cuadros se hizo mayor daño que un par de kicks a postes por lado. Ambos equipos cerraron el juego y el tránsito del partido se volvió friccionado y de mucha posesión. Así, el marcador quedaría con un ajustado 21 – 14 a favor del equipo del chileno, poniendo toda la incertidumbre de cara al segundo tiempo.
Tras la pausa del entre tiempo, las acciones cambiaron de color; el Alcobendas tomó las riendas del juego y puso a sus forwards por delante. Esto se mostró claramente tras una buena acción de maul en los 50’, la cual fue derrumbada por el Barça, lo cual significó una amarilla para los visitantes y un posterior try para los locales, tras la ejecución del penal a través del scrum. La presión de los madrileños agotó en demasía a un Barcelona que comenzó a quedarse sin ideas y a cometer errores claves en el desarrollo del juego; esto se traduciría en una nueva amarilla en los 53’, por carga en el aire. Esta brecha fue aprovechada por el cuadro de Cabrera que se apuró en estirar el marcador en los 55’, gracias a un nuevo try. Ya con el cuadro granate instalado en su propio juego, vinieron nuevos tries en los 60’ y 78’, que solo seguirían ampliando el marcador a su favor, dejando así el marcador final en un contundente 43 – 14, con el cual el Alcobendas se instaló en final del torneo.
De esta forma, la final de la Liga de División de Honor 2020-21 se llevará a cabo el próximo 30 de mayo, entre el Lexus Alcobendas y el VRAC Quesos Entrepinares, en Las Terrazas, el hogar del cuadro granate. Este será un duelo importante para el equipo de Cabrera dado que irán por su segunda liga en su historia (la primera fue en la temporada 2001-02), en contraposición al VRAC, que ostenta 10 títulos de liga, siendo el tetracampeón vigente de esta, desde la temporada 2016-17.
Fotografía: José Manuel Melero/Club Lexus Alcobendas
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