Desde hace cuatro años, el Club de Rugby Pudúes viene realizando un proyecto que busca darle un espacio a todo el espectro de la comunidad LGBTQ+ en la ovalada nacional.
“Buscamos un espacio donde realmente fuéramos un equipo LGBT+ con todas las letras del acrónimo. Nuestres compañeres trans, no binaries y mujeres no compiten en las mismas ligas, así que decidimos dar un paso al costado y hacer un club que no sea solo gay”, explica Daniel Quevedo, jefe de comunicación de Pudúes.
El club fue fundado en 2019 por ex miembros de Titanes, pero ahora ha desarrollado una identidad propia. “La palabra pudú no tiene género, por lo tanto todos y todas pueden ser llamados pudú” rezan desde la institución.
“Pudúes es un club que busca romper estereotipos en todo sentido” comenta Quevedo. Algunos de los pilares fundamentales del equipo son: anti-discriminación, abuso y machismo, además de dignificar a los deportistas que se identifiquen con otro género.
Actualmente, el club cuenta con 30 integrantes y entrena en el Parque O’higgins. Uno de sus objetivos para este año es jugar tantos partidos como le sean posible; ya han disputado amistosos ante equipos como Lions, Bárbaros, Liceo Borgoño y Titanes.
Pero la gran meta de Pudúes para este año está en noviembre, “queremos viajar a jugar un torneo en Buenos Aires” asegura Daniel Quevedo.
Se trata de la sexta edición del campeonato “Tackleando la LGBTFOBIA”, organizado por el club argentino Ciervos Pampas. El torneo tiene como objetivo responder a la discriminación y la violencia homofóbica. Además de “visibilizar la diversidad sexual”.
Así, Pudúes se ha convertido en uno de los estandartes más importantes de la comunidad LGBTQ+ en el rugby chileno, con planes de seguir desarrollando su proyecto y acercar la ovalada a más deportistas pertenecientes a las disidencias sexuales y de género.
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