A sus cortos cuatro años de vida, los «Monsharks», como se llama el equipo del Colegio Montemar de Concón, se preparan para su mayor desafío: Representarán a Chile en el mundial de rugby escolar en Francia.
El proyecto surgió el 2019, cuando apoderados del colegio, varios de ellos jugadores y exjugadores de clubes de la V Región, propusieron instalar el rugby como una rama deportiva del Montemar. Inicialmente, arrancaron con solo 21 niños de primero a cuarto básico, hoy ya cuentan con cerca de 150 jóvenes rugbistas de primero a cuarto medio.
Fueron los propios jugadores los que bautizaron al equipo. Inspirándose en la mascota del colegio, un tiburón, comenzaron a llamarse a si mismos los «sharks», surgiendo finalmente con el nombre Monsharks. Del mismo modo, fue una apoderada quien diseñó el escudo y las camisetas del club.
Desde hace ya algunos meses, se vienen preparando para su gran desafío, representar a Chile en la primera edición del mundial de rugby escolar, que se disputará en Francia entre el 2 y 7 de septiembre.
Ahí dirá presente el equipo M14 de los Monsharks, siendo uno de los tres representativos nacionales en el país galo, junto a COBS en el mondial de clubes amateur y por supuesto, los Cóndores en el mundial adulto.
La puesta a punto para el torneo ha sido ardua, incluso con su propio «desafío del guerrero», adaptado para niños. Este sábado, los Monsharks jugaron su último amistoso antes de partir rumbo a Francia el próximo 29 de agosto, enfrentando a su símil de Sporting.
Pero no solo eso, también han podido compartir con los Cóndores, en su preparación para la cita mundialista. Los jugadores de Monsharks tuvieron la oportunidad de participar en el Legacy previo al partido entre Chile y Namibia en Valparaíso. En dicha ocasión, los chicos de Montemar obsequiaron a los seleccionados un retrato con el escudo de su equipo y un cóndor volando hacía Francia. Además, recibieron una charla del head coach nacional, Pablo Lemoine.
«Fue muy emocionante, los muchachos quedaron muy motivados», comenta Alberto Guerrero, apoderado del colegio y mánager de los Monsharks. El cuadro de Concón ha forjado una afinidad con los Cóndores provenientes de la V Región, como Marcos López, Nicolás Herreros, Franco Velarde, Lucas Bordigoni y especialmente, Gaspar Moltedo, quien fue alumno del Colegio Montemar.
El torneo
El mundial de Francia será especial, pues marcará la conmemoración de los 200 años de la invención del rugby, cuando en 1823, según el mito, el joven William Webb Ellis tomó el balón con las manos y corrió durante un partido de fútbol en el Colegio Rugby de Inglaterra, naciendo así el deporte de la ovalada.
Es por ello que en Francia 2023, con motivo del bicentenario del rugby, se añadirán los mundiales escolar y de clubes, acompañando al mundial adulto. «La idea es celebrar la esfera completa del rugby: Colegio, club y selección», afirma Alberto Guerrero, manager de los Monsharks.
El Rugby Heritage Cup, organizado por el Colegio Pontlevoy de Francia, en conjunto con la Federación Francesa de Rugby, World Rugby y Unesco, será el primer mundial de rugby escolar. En el torneo participarán colegios invitados de cada uno de los países clasificados a la copa del mundo, en modalidad seven-a-side en categoría M15.
En su grupo, el Montemar enfrentará a Colleges Nord Isere de Francia, Cliffton Collage de Inglaterra y Witchurch RFC de Gales. Además, entre los 44 equipos participantes, en masculino y femenino, se encuentran el emblemático Colegio Rugby y el Iona de Australia, que organizará el próximo mundial escolar, en el marco de la copa del mundo de 2027, que se jugará en el país oceánico.
El objetivo es compartir el espíritu el rugby y conocer la cultura de otros países. Parte del torneo será también que cada colegio prepare un plato típico de su país y además represente uno de los volares del deporte ovalado. El campeonato ha sido promovido por leyendas del rugby como Phillipe Sella, Dan Carter, François Pienaar, David Kirk, John Eales, Daniel Dubroca, entre otros.
Una oportunidad única
Cuando se enteró del torneo, en noviembre pasado, Alberto Guerrero mandó inmediatamente correos a Chile Rugby y a los organizadores del campeonato, el Pontlevoy de Francia, con una presentación sobre el proyecto y la visión de Montemar, para ver la posibilidad de ser el representante chileno en el mundial escolar. «Le escribí a los franceses un viernes y me respondieron el domingo», recuerda Guerrero.
«Me citaron (los organizadores) a una reunión por zoom el lunes, de inmediato se comenzaron a conectar varios ‘pesos pesados’ del rugby, incluso un expresidente de la federación francesa», comenta el apoderado del Colegio Montemar.
La comisión organizadora quedó impresionada con la presentación enviada por el Colegio Montemar. «Uno de los presentes hablaba perfecto español y dijo que les había gustado mucho nuestro correo, porque reflejaba todo el espíritu de lo que ellos querían para el torneo», explica.
Así fue que el Colegio Montemar no solo fue invitado a participar como el representante de Chile en el campeonato, sino que también, a redactar el Código de Conducta del Mundial de Rugby Escolar, en conjunto con Pontlevoy, Rugby School, Iona, Shamas de Kenia y Asahalam de India.
Posteriormente, los Monsharks recibieron también el apoyo de Chile Rugby, para representar al país en el mundial. Ahora, después de casi un año de intenso trabajo de planificación y recaudación de fondos a través de auspiciadores e iniciativas propias, ya están listos para finalmente partir a Francia. Luego de su participación en el certamen, la comitiva del Montemar viajará a Toulouse para acompañar a los Cóndores en su debut mundialista ante Japón.
«Esto no se detiene aquí, ya están los más chicos, del M9 y M10 diciéndome que el próximo mundial les toca a ellos», cierra Alberto Guerrero.
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