Pese al buen arranque de Chile, los Cóndores no pudieron resistir y tuvieron que aprender la categoría inglesa en un durísimo partido donde los británicos se hicieron dueños totales del encuentro luego de anotar su primer ensayo, castigando hasta el más mínimo error de la escuadra nacional en su tercer duelo por el grupo D en el Mundial de Francia 2023
Los Cóndores de igual a igual
Inglaterra comenzó incisiva, buscando generar daño tempranamente a los chilenos, que consiguieron defenderse con firmeza, y aunque la seguidilla de penales podía ser una preocupación, los Cóndores no se dejaron abatir por los británicos, incluyendo en el camino una salvada en propio ingoal de Cristóbal Game para salvar un try prácticamente hecho del XV de la Rosa.
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Chile intimidar con un buen ataque por el sector derecho tras recuperar la ovalada con un tackle de Ignacio Silva y los Cóndores pisarían por primera vez las 22 europeas entrando a los 10 minutos. No obstante, la posesión no prosperaría, y comenzaríamos a entrar en un ciclo de pérdidas y recuperaciones.
El nerviosismo golpeó en un line mal ejecutado de Chile que derivó en una sencilla recuperación británica, pero Domingo Saavedra rescató la situación por el sector izquierdo cortando un pase inglés. No pasó mucho para que Inglaterra recuperara la ovalada, pero en cosa de segundos ya estaba otra vez en las manos criollas.
Los dos elencos estaban jugando de igual a igual, no existía un dominador claro que se impusiera en un partido donde ambos elencos peleaban por llegar rápidamente al ingoal del adversario.
El juego relámpago inglés que tanto se alabó en el último Mundial estaba reflejándose en las intenciones de un Chile sin miedo.
15 minutos. 0-0. Un escenario que ni el más optimista habría esperado. Los Cóndores verdaderamente estaban luchando a la par de uno de los mejores equipos del mundo y los creadores de este deporte.
El momento decisivo
Poco a poco los ataques ingleses se estaban volviendo cada vez más insistentes, pero Chile seguía resistiendo. Fue posible crear otra buena chance ofensiva tras un excelente kick largo que consiguió un line a favor de los Cóndores a metros del ingoal rival. Sin embargo, nuevamente se realizó una mala ejecución, entregándole fácilmente la ovalada a los ingleses, que no desaprovecharon la oportunidad y se lanzaron hacia territorio chileno.
Los británicos atacaron con insistencia en esta posesión, hasta que finalmente consiguieron llegar al try por el sector derecho gracias a las manos de Henry Arundell a los 20 minutos. Finalmente se rompía el 0-0 y el XV de la Rosa tomaba ventaja por cinco puntos.
Se rompe la igualdad: Inglaterra castiga los errores de los Cóndores
Poco después los europeos consiguieron sumar de nuevo gracias a un try de maul apoyado por Theo Dan, que tras la conversión de Owen Farrell puso a los creadores del rugby 12-10 arriba a los 25’.
Desde este punto, el dominio inglés fue claro. El XV de la Rosa mantenía una gran agresividad en su juego, buscaban asegurar la victoria mientras Chile seguía desconcertado. Había hecho un excelente partido en los primeros 20 minutos, pero los detalles marcan diferencias ante rivales tan temibles como estos, y las malas ejecuciones en los line los habían condenado a desperdiciar oportunidades ofensivas que siempre serán escasas frente a una escuadra de esta envergadura, además de ser el origen del primer ensayo de los europeos.
Los chilenos tampoco estaban aprovechando correctamente sus penales. Eran ambiciosos, buscando ganar muchos metros, pero tristemente no salían y acababan siendo posesiones inglesas.
Los británicos no perdonaron las imprecisiones chilenas y les recordaron con dureza que en la copa del mundo no se toleran estos errores, que el partido casi perfecto que estaban haciendo los Cóndores durante los primeros 20 minutos es el estándar, y que bajar de ese nivel se paga caro.
Henry Arundell azotó la ovalada por la derecha a los 30’, Bevan Rodd apoyó en el ingoal a los 35’ y Marcus Smith demostró su genialidad atacando con su velocidad desde el centro, echando a correr el balón con su pie para superar a todos como un relámpago blanco que conquistó un nuevo try a los 40’ para Inglaterra, que tras dos conversiones de Owen Farrell acumulaba una ventaja de 31-0.
Inglaterra supera a los Cóndores con uno menos
Entrando al segundo tiempo, Chile comenzó a sufrir desde muy temprano a raíz de la tarjeta amarilla de Matías Dittus a los 45’, y los ingleses les hicieron sentir lo doloroso que sería aguantar 10 minutos con 14 jugadores, llevando al peor pasaje del partido para los nacionales.
Theo Dan castigó el ingoal (46’), seguido de Arundell que conseguía su hat-trick a los 48’, extendiendo la distancia a 45-0 tras las conversiones de Owen Farrell.
Lección de categoría
Ya con 15 jugadores, Chile comenzó a despertar y emparejar un poco más la situación. Desde los 50 minutos comenzaron a tomar mejores decisiones con sus penales, que venía cobrando de manera imprecisa o transformándolo en jugadas difíciles de comprender, como un scrum en terreno propio frente al poderío del pack británico, y a rescatar sus propios lines, maquillando las que habían sido dos de las grandes falencias del juego chileno hasta este momento.
Pese a esto, Inglaterra volvería a recordarle a Chile que comenzar a ejecutar un partido correcto no es una hazaña en el Mundial, sino el estándar, y golpeó con la categoría de una potencia, luego de que Arundell desplegara magia en el campo de juego, levantando la ovalada con su pie para sobrepasar la marca chilena y atrapar el balón en el aire para posarlo en el ingoal chileno. Luego de la conversión de Owen Farrell, el marcador quedó 52-0 a los 62 minutos.
Arundell golpearía nuevamente al 69′ con su quinto ensayo de la jornada para el 57-0, frente a un Chile que buscaba el try con todas sus fuerzas, sin cobrar ninguno de sus penales a palos, incluso cuando estaban desde una buena posición.
Smith conquistaría el próximo try, luego que los británicos arrebataran un line a Chile y tras una excelente combinación con Ford, acabó apoyando en el ingoal. En la siguiente jugada, sería Jack Willis quien marcaría su ensayo, ambos convertidos por Owen Farrell.
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