Old Johns revivió hace una semana con su triunfo sobre la UC y ayer consolidó esta alza que lo deja más cerca de los puestos que clasifican a la zona de título. En un partido muy batallado, donde llegó a estar 19-3 abajo y terminó con 11 puntos de desventaja el primer tiempo, los ingleses metieron corazón, supieron contrarrestar a los hermanos Huerta y compañía y festejaron a los gritos el último try de Felipe Neira, justo antes del pitazo final. Fue sufrido, revitalizador y vaya que lo necesitaban.
Todo comenzó bien con el penal de Francisco Neira a los 7’. El pateador del quince inglés tuvo una jornada redonda acertando varias ejecuciones desde posiciones nada cómodas. Pero Stade Francais tiene lo suyo y el melenudo Joaquín Urria consiguió dos tries, lo que sumado a la carrera al in goal de Nelson Breve, decretaron una diferencia que en rugby no es irremontable, pero la visita tendría que luchar mucho para revertirla.
Y así no más fue. A los 34’ cayó el primer try del cuadro rojo y fue obra de Sebastián Segovia, sin conversión. Fundamental, para romper el hielo. Desde el camarín, las palabras golpeadas y, sobre todo, el vamos con golpe en la espalda. Marco Valenzuela consiguió otra jugada de 5 puntos y Francisco Verscheure logró una más, ambas con conversiones de Neira. Fue el momento de la remontada, con penal de Neira como aparente broche de oro. ¿Tarea hecha? Para nada, el dueño de casa también estaba para dar guerra.
Urria celebró su tercer try y Christian Huerta pateó de buena manera un penal para dejar las cosas 27-25. Todo lo remado por Old John’s no servía de nada. Otra vez había que trepar desde bien abajo, pero lo hicieron calladitos. Neira acertó un penal y el final fue con todos en masa corriendo a la zona de gloria y Felipe tomándola para el 35-27. Festejado como pocas veces este año. Un desahogo.
Fuente: Diario Concepción
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