Una de las tradicionales fiestas del verano, el Seven de Viña del Mar, organizado por Old Mack’s, será suspendido definitivamente para la temporada en curso, debido a la situación sanitaria del país; pese a que la organización buscó hasta último momento en poder realizar la actividad que alcanzaba este año su trigésimo quinto aniversario.
Con el cambio que había implicado el separar la competencia sudamericana de la competencia de clubes, el Seven de Viña había logrado reinventarse y mantener uno de los eventos más tradicionales de la ovalada nacional y de la región. De esta forma, en su edición 34, 12 equipos estuvieron presentes en la categoría masculina, a lo que se sumó la competencia femenina -inédita en este torneo- y Seniors.
No habiendo tenido mucho tiempo para reaccionar, la situación sanitaria rápidamente instaló la incertidumbre a nivel nacional, siendo la fiesta del rugby viñamarino una de las instancias que se veían más próximas a la vuelta a las canchas.
Y, demostrando estar a la altura, la organización buscó distintas fórmulas para poder realizar el evento, ya sea desde disminuir la cantidad de participantes y categorías (la última edición contó con categorías Seniors y Femenino) o el prescindir de los clubes internacionales, figuraron entre las distintas estrategias para poder llevar adelante el Seven.
Hasta último momento, la edición 35° del evento se mantuvo con la incertidumbre y una pequeña ventana abierta para su realización. “Ya hay cero opción [SIC], además que deportivamente se nos estaba complicando”, señaló Ignacio Iriarte, presidente de Old Mack’s, en entrevista con el Mercurio de Valparaíso, agregando que “en Santiago autorizaron a hacer un torneo en la fecha del Seven, entonces hacer algo después era pillar en la época de descanso a los jugadores o la preparación de la próxima temporada”.
Finalmente, con el retroceso en la situación sanitaria de Viña del Mar a fase 2, la logística se volvió cuesta arriba de cara a organizar un evento de estas características. “Hace como un mes atrás, cuando las condiciones estaban buenas, pensamos en hacer un buen torneo de preparación para el 2021, de quince, invitando equipos para un cuadrangular o hexagonal”, comentó Iriarte.
En perspectiva nacional, Iriarte valora las instancias competitivas levantadas por federación, donde los jugadores han podido reactivarse en materia deportiva; “por suerte se logró hacer selecciones regionales [Torneo Super 4], que algo de actividad le dio a algunos jugadores, pero la mayoría ha hecho solamente entrenamientos físicos” acotó.
Por lo pronto, el Seven de Viña se tomará una pausa esta temporada, en miras a lo que será la próxima temporada estival. Si bien Ignacio señala que las ganas y motivación para la realización del evento se encuentran presentes, también agrega que “hay que ver qué pasa con nosotros y equipos de Concepción, quizás deciden jugar solo los de Santiago”; todo esto dependiendo claramente de la impronta sanitaria que se viva en el país.
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